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La Gran Senda de Málaga: viaje al paraíso interior

La Gran Senda de Málaga: viaje al paraíso interior

La Gran Senda de Málaga es un proyecto pionero que incorpora la gran variedad de territorios y culturas que integran nuestra provincia a través de una gran ruta que conecta todos nuestros espacios naturales y municipios. Entre sus más de 700 km, 35 etapas y 3 variantes, podremos atravesar hasta 9 comarcas y casi 60 municipios diferentes. También enlaza con todos los senderos catalogados de la provincia, con el Camino Mozárabe de Santiago y con el Gran Recorrido Europeo que atraviesa toda la costa mediterránea hasta llegar a Grecia.

 

Pero no se trata solamente de una ruta turística, cultural o deportiva, sino que es un viaje apasionante de búsqueda interior, donde tener la oportunidad de crecer y expandirte como persona. De hecho, las diferentes etapas de la Gran Senda se dividen en 3 categorías principales: cuerpo, mente y emociones, poniendo en práctica aquel viejo proverbio romano de “Mens sana in corpore sano”.

En cuanto a la naturaleza, podremos descubrir hasta 4 parques naturales, 2 reservas naturales y 3 parajes naturales, donde poder practicar deportes y actividades al aire libre como rafting, vías ferratas, piragüismo, descenso BTT, escalada o descenso de cañones.

Si hablamos de cultura, tendremos la opción de visitar numerosos museos, monumentos, espacios culturales, yacimientos, balnearios, bodegas, miradores, puertos deportivos o campos de golf, sitios todos ellos en los que podremos descubrir el rico patrimonio histórico y cultural de la provincia y también sus tradiciones más arraigadas o pintorescas.

En torno a la Gran Senda de Málaga también se organizan una gran cantidad de actividades eventuales a lo largo del año, entre las que se encuentran rutas, jornadas, conferencias, talleres y encuentros.

SENDA LITORAL DE MÁLAGA

Además de la Gran Senda de Málaga, que rodea todo el contorno de la provincia, también se ha promovido otra ruta complementaria que conecta toda la Costa del Sol. La ruta recorre casi 200 km de litoral uniendo 14 localidades malagueñas desde Manilva, cerca ya del Campo de Gibraltar, hasta Maro, en la Axarquía y limitando con Granada. En esta senda costera podremos perdernos en una amplia variedad de playas y puertos deportivos pero también contemplar las más de 40 torres almenaras de la época andalusí utilizadas contra los piratas del Mediterráneo. Además, antiquísimos yacimientos de diversos orígenes esperan ser descubiertos por el caminante.

 

Pueblos blancos

Pintorescos pueblos blancos como Frigiliana, Monda, Alameda, Carratraca, Benaoján o Villanueva del Rosario, entre otros, aguardan al visitante para sorprenderlo durante su recorrido por la Gran Senda.

Parques naturales

Gracias a la Gran Senda, además de 2 reservas naturales y 3 parajes naturales, se pueden recorrer hasta 4 impresionantes parques naturales: Sierras de Tejada, Almijara y Alhama; Montes de Málaga; Sierra de Grazalema y Sierra de las Nieves.

 

Pinturas rupestres

Las pinturas rupestres de la Cueva de Ardales son unas de las más antiguas del mundo, junto a la de Maltravieso, en Cáceres, y La Pasiega, en Cantabria. Datan de más de 66.000 años y fueron creadas por los neandertales.

Yacimientos

Importantes yacimientos arqueológicos y ruinas como el Castillón de Gobantes (fenicio) o  Bobastro (mozárabe) hacen que el caminante descubra el rico pasado histórico de Málaga.

 

Patrimonio industrial

Durante los siglos XIX y XX, Málaga tuvo una industria muy boyante de la que todavía hoy se conservan bastantes ingenios azucareros y grandes embalses, que se han sumado a la oferta patrimonial de la provincia.

Sabor a Málaga

Málaga también es singular gastronómicamente hablando y posee numerosos platos autóctonos en cada comarca, destacando por su popularidad los espetos de sardinas, el gazpachuelo, la cazuela moruna, la porra antequerana, el bienmesabe o el vino Málaga Virgen.

Camino Mozárabe de Santiago

Se está recuperando y poniendo en valor este histórico camino a Santiago de Compostela, que fue vital durante la Edad Media, ya que unía los puertos del Reino de Granada (Granada, Málaga y Almería) con las ciudades del interior de la Península Ibérica y, en última instancia, con Santiago.

Redacción: Fran Gallardo  Fotografía: Juan María Álvarez Espada

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