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Pepa Flores no recogerá el Goya de Honor

Pepa Flores no recogerá el Goya de Honor

Pepa Flores no recogerá el Goya de Honor. Eso es lo que se desprende de la publicación que su hija, la actriz María Esteve, ha hecho en Instagram. La hija de Pepa Flores ha compartido con sus seguidores una foto en la que aparece junto a su hermana, la cantante Celia Flores, y en la que explica que serán ellas las que recogerán el premio en nombre de su madre. 

Publicación del Instagram de María Esteve

Pepa Flores se retiró de la profesión y de la vida pública a mediados de los 80 y desde entonces ha sido muy coherente y consecuente con esta decisión. Muchos esperaban que esta noche, en la gala de los Goya que se celebra en su tierra, rompiera con ese retiro por unas horas y recogiera personalmente este galardón que le conceden sus compañeros por su trayectoria. Aunque desde el principio personas cercanas a ella, como es el caso de su hermana, anunciaron que no sería así. 

 

Su hija María asegura en el post de Instagram que a su madre le hace mucha ilusión este premio, pero no asistirá a recogerlo al Martín Carpena. Demuestra con este hecho su deseo expresado en múltiples ocasiones de mantenerse alejada de las cámaras y del foco de la vida pública. Desde que se anunciase el premio por parte de la Academia de Cine el nombre de Pepa Flores y de Marisol ha vuelto a ser protagonista en los medios, pero este silencio y la no asistencia de la que ha sido una de las actrices más mediáticas del siglo pasado en nuestro país, confirman que lo que ella desea es que una vez pasada la gala, el nombre de Marisol vuelva de nuevo a formar parte del recuerdo. 

 

Málaga cuenta actualmente con dos explosiones que homenajean a la artista. Por un lado, una de fotografías en la calle Alcazabilla, y por otro lado, una en Salas Mingorance del Archivo Municipal que lleva por título ‘Marisol. Mi vida es mía’. La decisión de Pepa Flores de no recoger el Goya de Honor es suya y hay que respetarla. Seguro que desde su casa en La Malagueta recibirá el cariño de todo su sector y de todo un país que sigue admirando a la que fuese la niña risueña que aparecía en la gran pantalla y que llevaba la tristeza por dentro. Desde aquí solo podemos felicitarla por su coherencia, algo que no está muy de moda en la sociedad actual. 

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