“De tú a tú genial. Pero hablar en público me da pánico”. Probablemente te sientas identificado con esta frase y título de este artículo. Incluso la has dicho en algún momento. Yo la oigo a diario. Porque diariamente asisto a eventos empresariales o conozco a profesionales que han de afrontar situaciones que les abruman y que tienen en común que han de hablar ante un público.
Al mismo tiempo, si lees o escuchas a los expertos en recursos humanos o a los “gurús” empresariales actuales, te habrás dado cuenta de que todos priorizan las habilidades sociales como un factor de éxito tanto en la búsqueda de empleo como en la actividad empresarial. Y, de entre las muchas habilidades sociales que un profesional o un directivo debe entrenar, destaca entre todas ellas LA COMUNICACIÓN. Yo la llamo “la madre de todas las habilidades” porque las demás la necesitan para poder ejercerse. Piénsalo bien. ¿Qué actividad o situación profesional o académica puede realizarse sin la presencia protagonista de la comunicación?
Tengo buenas noticias para ti.
La primera: Esto va de APRENDER. Muchas personas expresan que “no me es natural” hablar en público. Usan “natural” como sinónimo de genético, de serie, como un elemento de carácter sobre el que no puedes actuar. Y esto es falso. Naturalmente, como persona, dispones de órganos y funciones que te permiten hablar. Pero has de aprender a hacerlo. Aunque no lo recuerdes en ti mismo, lo has vivido en hermanos, hijos, sobrinos… Una vez aprendemos a hablar en un uso coloquial, nunca más se le ha prestado atención. Lamentablemente, para muchas generaciones, en clase no nos enseñaron oratoria, ni dialéctica, ni ninguna técnica de exposición en público. La buena noticia es que, al no venir de serie la habilidad o la ausencia de ella, adquirirla es tu decisión.
» Aprender a Hablar en Público no consiste en dejar de ser quién eres»
La segunda: La mayoría de las cosas que has aprendido en el ámbito profesional es mucho más complicado, difícil y costoso en tiempo y dinero que entrenar hablar en público. En tan sólo 20 horas puedes aprender todas las técnicas que necesitas. No es un ejemplo. Es mi compromiso. Después, si tienes la paciencia de practicarlas, se irán convirtiendo en habituales. Finalmente, sé que lograrás disfrutar hablando en público. Muchas personas que han experimentado este entrenamiento dan testimonio de ello.
La tercera: Da igual la edad, la formación previa, la experiencia previa, el estilo de personalidad o carácter. Toda persona, sin disfunción orgánica o funcional en sus órganos fonadores o su sistema nervioso central en el área del lenguaje puede, si quiere y decide aprender y practicar, convertirse en un buen orador (ahora se le llama speaker). Te sorprendería saber cuántas personas que hoy admiras cuando las ves y escuchas sobre el escenario se sentían hace unos meses o años exactamente igual que tú. Nerviosos, con ansiedad, inseguros, etc.
La cuarta: El primer día del entrenamiento observo a cada participante. Y todos, sin excepción, tienen una habilidad comunicadora extraordinaria. Mi labor consiste en hacérsela ver y darles técnicas para pulirla, para sacarle partido, para buscar la mejor versión. Aprender a Hablar en Público no consiste en dejar de ser quién eres. Muy al contrario. Se trata de aprender a dar siempre tu mejor versión. El nivel I del entrenamiento, común para todo el mundo es más que suficiente para comerciales, directivos, alumnos, opositores, empresarios, profesionales… Bien es cierto que locutores de radio, docentes, actores, políticos, presentadores de televisión, en definitiva, profesionales de la comunicación, necesitan un nivel II un poco más complejo.
«En tan sólo 20 horas puedes aprender todas las técnicas que necesitas»
La quinta: Un buen orador no es un charlatán, ni un “gracioso”. Un buen orador es alguien que tiene un contenido que comunicar y sabe hacerlo con una buena expresión oral y gestual. Un buen orador no aburre, pero tampoco tiene que arrancar carcajadas. Un buen orador sabe usar el sentido del humor, sabe adaptarse a distintos públicos y, sobre todo, sabe COMUNICAR. Por tanto, no te asustes. Hablar en público no significa ser “un showman”.
Sé que has invertido tiempo y dinero en tener una magnífica página web; en tener una buena presencia y reputación en tus redes sociales; en presentar un Curriculum Vitae profesional. Incluso has cuidado el diseño de tu tarjeta de visita y, si incluye tu foto, te la hizo un profesional. Sé que cuidas la imagen de tu empresa, tu negocio o tu proyecto. Es por ello que sé que ha llegado tu momento. El momento de convertirte en tu mejor herramienta de presentación. Nada ni nadie puede sustituirte. Un magnífico examen y un excelente CV pueden no ser suficientes si haces una mala entrevista de selección. El mejor proyecto empresarial y un perfecto plan de negocio de nada sirven si en la rueda de inversores no consigues la financiación que necesitas porque tu presentación no les cautivó. Qué mal te sientes cuando, sabiendo que tu producto o servicio es el mejor, no logras persuadir a tus potenciales clientes y cerrar la venta.
Son solo unos pocos ejemplos de los muchos que vivo a diario. Tal vez te sientas identificado con alguno de ellos. Y tal vez, también has asistido a una brillante exposición y has sentido el calor de un aplauso cerrado del público satisfecho y emocionado. Y tal vez, has pensado que te gustaría vivir esa sensación desde el escenario.
Esta es la última buena noticia para ti. No es un sueño, ni un deseo inalcanzable. Y para dar el primer paso hacia ese momento especial, hemos organizado un ciclo de talleres para ti.
Redacción: Lucía Miralles
Taller
Lucía Miralles, que ya estuvo en Profesionalmente (aquí puedes leer el artículo de aquella sesión), ofrecerá un ciclo de talleres más amplios. El primero será el 2 de mayo sobre ‘Habilidades y técnicas para organizar mi tiempo’ en el Hotel Molina Larios. El precio de inscripción es de 35 euros. Puedes confirmar tu asistencia y solicitar más información sobre próximos talleres en ega@executiveglobalagency.com