La piel de la cara es más sensible que la del resto del cuerpo, ya que al estar en contacto directo con el ambiente suele resentirse más a menudo. Además, dentro de la cara hay algunas zonas que son especialmente delicadas. Por ejemplo, la piel del contorno de los ojos es hasta diez veces más delicada que la del resto del rostro.
Por esta razón, es fundamental dedicar una particular atención al cuidado de la piel de la cara, en concreto a mantenerla limpia e hidratada. Asimismo, deberemos tener en cuenta que los cuidados deben volverse más frecuentes con el avance de la edad. Hoy en día, son muchas las marcas que, como Weleda, han creado una línea de productos orientada a combatir los signos del envejecimiento. El Serum de Onagra sobresale, entre otros, por su efectividad a la hora de revitalizar, fortalecer y rellenar la piel.
De cualquier forma, el cuidado facial debe comenzar a implementarse desde la primera juventud. Por este motivo, a continuación te ofrecemos una serie de tips para el cuidado facial antes de dormir, que se podrán seguir independientemente de la edad que se tenga.
Limpiar
Antes de acostarnos deberemos desmaquillarnos adecuadamente y lavarnos la cara en profundidad con agua tibia y jabón neutro. De esta forma, eliminaremos las impurezas y haremos que nuestro cutis luzca más sano y radiante. Para agilizar el proceso de limpieza, puede resultar positivo optar por una loción limpiadora 2 en 1.
Exfoliar
Puntualmente, deberemos hacer una limpieza de cutis más exhaustiva. En este sentido, se recomienda realizar entre una y dos veces por semana una exfoliación facial completa. No obstante, tampoco es recomendable abusar de ella, ya que puede provocar una mayor sensibilidad, así como irritaciones cutáneas. Por lo general, excederse con la exfoliación de la piel es uno de los errores comunes en el cuidado facial.
Tonificar
La tonificación suele ser la gran olvidada en el cuidado de la piel. Sin embargo, su importancia es fundamental ya que garantiza el cierro de los poros y la eliminación de restos de otros productos. De este modo, para tonificar la piel de la cara podremos usar productos como el agua de rosas o el agua micelar. De la misma forma, también podremos utilizar diversos tipos de mascarillas en función de cada tipo de piel. Igualmente, también existen una serie de ejercicios y masajes que ayudan a conseguir una piel más tonificada.
Hidratar
La hidratación es, sobre todo, la parte más esencial de cualquier rutina de cuidado facial. La hidratación de la piel tiene propiedades calmantes y reparadoras. Por esto, hidratar la piel es importante en cualquier época del año, pero principalmente después del verano. En cuanto al momento del día, cuidar la piel por la noche es altamente beneficioso, ya que mientras dormimos la piel se vuelve más receptiva a cualquier tipo de tratamiento. De la misma manera, dormir a diario las horas suficientes es otro de los aspectos que harán que nuestra piel luzca brillante y elástica por más tiempo.
